Cada ciudad requiere de puentes para establecer la comunicación de un punto con otro. Su importancia dentro del desarrollo de cada sociedad, hace que existan legislaciones dedicadas para regir la inspección y mantenimiento de las mismas.
Un puente es una obra civil que requiere de mucha atención, desde los elementos que conforman el puente hasta la pintura que protegerá las barandillas de la oxidación. Es, por ello, que presentamos algunos conceptos básicos a tener en consideración para una mejor comprensión.
Conceptos generales y acciones
A fin de tener una idea clara sobre la construcción y mantenimiento de los puentes, es necesario conocer algunos conceptos generales y medidas de acción requeridas. Cabe destacar que dichas estructuras están expuestas a diferentes cambios climáticos, cargas, funciones, entre otros factores que, de no hacerse seguimiento e inspecciones; tendrán un deterioro rápido.
Elementos estructurales de un puente
Los puentes son estructuras destinadas para permitir la circulación de un punto a otro. Siendo así, se constituyen de diferentes elementos que, unidos entre sí, se encargarán de brindar una estructura segura y funcional.
Elementos Funcionales
Entre los elementos funcionales destacados para la construcción de un puente, podemos destacar los siguientes.
Cimbras auto-lanzables
También se le conocen cono cimbras de avance. Se caracterizan por ser estructuras auxiliares capaces de trasladarse a lo largo de un puente por sus propios medios.
Por lo general, son empleadas para ofrecer soporte a otra estructura de forma provisional, especialmente durante la ejecución de grandes infraestructuras. Además, se frecuentan en la construcción de viaductos de ferrocarril y carreteras.
Pintura en Barandillas
Debido a la exposición climatológica, la pintura de las barandillas debe cumplir con las normativas expuestas en la legislación española. Además de ser resistente para evitar el deterioro y oxidación de las barandillas.
Por lo general, las barandillas requieren de un tratamiento previo para posteriormente aplicar la pintura encargada de cubrir el metal. Por otra parte, se debe repintar y limpiar con disolventes para ofrecer un acabado estético y profesional.
Losas de transición
Destaca como una de las soluciones más empleadas en las carreteras para ofrecer continuidad al paso entre un tablero del puente y un terraplén. Por otra parte, sirve para producir un cambio de pendiente admisible.
En condiciones normales, con asientos controlados del terraplén y ejecución cuidadosa de la losa, el funcionamiento es correcto, pero con cierta frecuencia aparecen problemas que afectan al confort y generan gastos de conservación importantes. Esta situación suele ser de mucha atención durante la construcción de carreteras.
Aparatos de Apoyo
Los puentes suelen estar constituidos por materiales por elementos de apoyo que dan garantía a la transmisión de cargas de un elemento a otro al soportar el paso de vehículos de diferentes cargas. Asimismo, los apoyos permiten o previenen movimientos relativos del elemento de unión.
Por otra parte, deben estar formulados para ofrecer una alta durabilidad y alta resistencia al deterioro, por lo que deben contar con una larga vida útil.
Mantenimiento y conservación de la estructura
La conservación de una estructura en función del tiempo, requiere de un mantenimiento que puede variar dependiendo del objetivo para la cual esté diseñada. De no llevarse a cabo, presentará un deterioro exponencial.
Cabe destacar que la gestión de obras de paso de la red de carreteras se fundamenta en el conocimiento y caracterización de dichas estructuras, mediante un inventario cuya actualización es periódica. Además, se debe tener la información sobre su estado de conservación.
Inspecciones
Existen tres tipos de inspecciones, las cuales son llevadas a cabo para tener al alcance la información sobre el estado de conservación de la estructura.
Inspección básica
También conocida como inspección rutinaria. Son llevadas a cabo por el personal encargado del mantenimiento de la carretera y se realizan en todas las obras de paso iguales o mayores a un metro de luz.
Tienen como objetivo hacer un buen seguimiento del estado de la estructura con el propósito de detectar lo antes posible fallas que podrían generar gastos considerables de conservación o reparación.
Inspección principal
Se efectúa mediante un personal especializado en la determinación minuciosa del estado de los deterioros de los elementos. En comparación a la inspección básica, es realizada por inspectores de puentes y se evalúan los deterioros de los distintos elementos de la obra paso por paso.
Es importante resaltar que, este tipo de inspección se debe realizar cada cinco años.
Inspección especial
Se ejecuta con todo tipo de equipos especiales y personal especializado para el estudio en detalle de las patologías estructurales. Con ello, se busca la elaboración de informes de estado o proyectos de reparación de la obra.
Realización de inventario
Para poder conocer el estado de las obras, Se debe conocer cuáles y cómo son dichas obras, así como su ubicación. Esta etapa es conocida de forma convencional como inventario de obras de paso.
Con ello, se permite la estimación del estado de las obras de paso, asignándoles un índice de condición, que se obtiene a partir de la naturaleza del daño, el grado de su importancia y la extensión de su afección al elemento.
Por otra parte, se establecen las prioridades de reparación, ponderando a su vez los índices de condición mediante factores que tienen en cuenta la seguridad, la funcionalidad, el tráfico, la importancia del itinerario donde está ubicada la estructura, la posibilidad de itinerarios alternativos, el valor patrimonial o histórico.